El Hinayana (pequeño vehículo) busca la liberación individual del sufrimiento al erradicar los tres factores que lo causan: la atracción, la repulsión y la ignorancia. Estos tres factores impiden que el ser escape del flujo de la existencia cíclica condicionada o samsara, manteniendolo encadenado a los interminables renacimientos. En esta concepción, cuando las tres causas del renacimiento se apagan, el ciclo condicionado del samsara lo hace también, como la extinción de una llama.
El Mahayana (gran vehículo) imprime un caracter más dinámico a la iluminación. Desalienta la busqueda del nirvana como medio para poner fin al sufrimiento individual, anteponiendo la busqueda de la liberación del sufrimiento para todos los seres. Se alienta la perspectiva de que, la obtención del nirvana, resulta ser el medio más eficiente para estar en posibilidades de auxiliar a los seres en el camino que conduce más allá del sufrimiento. Este caracter dinámico implica que el aspirante busque alcanzar el nirvana, no para abandonar definitivamente el océano de la existencia del samsara, sino para sumergirse de lleno en él con el fin de auxiliar a otros en el camino de la liberación.
El Vajrayana (vehículo de diamante o indestructible) por su parte, mantiene la misma aspiración de liberación universal, tal y como la hace el mahayana. Ambos vehículos están impregnados por la misma motivación compasiva hacia todos los seres. La principal diferencia entre ambos, radica en los métodos utilizados para alcanzar la liberación y en el tiempo invertido para lograrlo. Mientras que el mahayana utiliza métodos que implican un largo periodo de tiempo para alcanzar la iluminación, el vajrayana sostiene que haciendo uso de técnicas especiales, el logro de la ilumianción resulta posible en un corto periodo de tiempo.
Estos ejercicios especiales se relacionean con los canales energéticos (nadis), con los vientos energéticos (pranavayu), con las gotas esenciales creativas (bindu) y con técnicas contremplativas sutiles del atiyoga (dzgchen).
Las doctrinas del vajrayana o tantra búdico constituyen una tradición esotérica, que une elementos del yoga y de las antiguas religiones autóctonas de la India con concepciones propiamente budistas. Influjos indios desci- sivos, desde el noroeste, introdujeron una característica simbología de la luz, y, desde el noreste, un ritual de contenidos sexuales que se manifiesta acusadamente en su iconografía.
Fuente: Diccionario de la Sabiduría Oriental, Paidós.
Documentos sobre Hinayana, Mahayana y Vajrayana
Libros sobre Hinayana, Mahayana y Vajrayana